Garra del diablo

En medicina y fitoterapia, la garra del diablo es conocida por sus propiedades inflamatorias porque la planta contiene ingredientes activos útiles para aliviar el dolor articular. Las principales propiedades beneficiosas del Harpago se encuentran en sus raíces. Estas propiedades son conocidas desde la antigüedad por las tribus africanas, que las utilizan para tratar la fiebre, las infecciones e incluso la malaria. El Harpago también es válido en caso de dolores de cuello, artritis, artritis reumatoide, gota y para combatir la hipertensión. Se dice que la garra del diablo es tan especial que también puede realizar una importante función reductora del colesterol. De hecho, el Harpago puede reducir la absorción del colesterol malo por el intestino, gracias a unas sustancias llamadas fitoesteroles. El Harpago también se recomienda a quienes padecen acné y/o espinillas ya que purifica la piel y la defiende de las agresiones externas. El Harpago debe su nombre común al aspecto característico de sus frutos, que están cubiertos de “ganchos”. . La garra del diablo es una planta perenne inodora y de sabor amargo, que crece en rangos climáticos entre 17 y 30 grados en el sudeste de África. La Garra crece de forma silvestre en Namibia, Angola, Botswana y en el desierto de Kalahari. En 1900 fue introducido en Europa por GH Mehnert, un soldado alemán que tuvo el mérito de dar a conocer sus propiedades en Alemania.