Toronjil

El nombre Melissa proviene del griego y significa "abeja" o "la que da miel". Sin duda su dulce néctar y embriagador aroma atrae a abejas e insectos de todo tipo que chupan el néctar. Griegos, árabes y latinos recomendaban su uso para calmar estados de ansiedad, describiéndola incluso como una 'planta que alegra y reconforta el corazón'. Ideal para calmar la melancolía y superar los momentos más críticos de la vida. La melisa también se llama hierba Limoncina, es una planta herbácea perenne perteneciente a la familia de las Lamiaceae. Su reconocimiento se ve facilitado tanto por sus hojas pecioladas, ovaladas, peludas, reticuladas y dentadas, como por su olor parecido al del limón. Se recomienda cosechar este último, del que se obtienen las propiedades curativas, antes de la floración. Sus propiedades beneficiosas pueden utilizarse para liberar tensiones y reducir el nerviosismo, la irritabilidad, la inquietud y el estrés. Ideal también para afrontar el estrés acumulado durante la jornada laboral o problemas relacionados con el ámbito psicológico. Su acción sedante también es eficaz para combatir de forma natural el insomnio y los dolores de cabeza. Entre sus propiedades encontramos las antiespasmódicas, para una mejor digestión, para calmar calambres abdominales, náuseas y reducir los síntomas del síndrome del intestino irritable. La melisa es rica en ácido cafeico y ácido rosmarínico, poderosos antioxidantes que neutralizan las especies reactivas de oxígeno. El toronjil contiene un analgésico natural, el eugenol, que resulta especialmente útil para combatir los dolores menstruales.